La decisión de Cristina Fernández de ordenar a la Junta Electoral partidaria que controla de bajarle la lista a Quintela confirmó lo que todos piensan y sólo algunos expresan: el tiempo está haciendo estragos en su capacidades políticas y es llevada por su entorno familiar –puntualmente por su hijo Máximo- a tomar decisiones que sólo dejan en claro su soberbia y personalidad autoritaria, sin importar los costos que implican.
Mario Ishii, el intendente de José C. Paz, en el marco de un plenario del Pj, salió a tomar distancia de la ex presidenta, asegurando que La Cámpora la está «asesorando mal». Para el histórico alcalde, es «una locura» ir a una interna. Y por si fuera poco enfatizó que «Hace 7 años los que ahora piden competir dejaron tirado al PJ».
«Esta vez se está equivocando, la están haciendo equivocar, la están asesorando mal», xu subrayó Ishii, quien además manifestó su respaldo al gobernador Axel Kicillof, a quien «voy a respaldar hasta las últimas consecuencias».
Ishii aseguró que es «una locura» hacer una interna en un plazo tan breve. «No se puede hacer, no se llega a ningún tiempo, la hicieron para que haya un solo candidato, traten de no hacer una interna vergonzosa y aniquilar al peronismo porque ya habrán aniquilado todo», sentenciò.
En un acto realizado en el playón de estacionamiento de la última nave del Mercado Concentrador, con una audiencia multitudinaria, Ishii, insistió en que: «No está el PJ para hacer una elección cuando los abuelos están en la calle pidiendo un aumento y los cagan a palos».
La responsabilidad de la sinrazón, para Ishii –y para la mayoría del colectivo de UxP, es toda de La Cámpora, con quien viene manteniendo un largo conflicto desde hace tiempo, tal como sucede con la mayoría de los intendentes y agrupaciones del panperonismo. La razón es clara: la vocación autoritaria de Máximo Kirchner –heredada de su madre- de exigir armar las listas generales, pero también las seccionales, a dedo.
«De la listas nacionales y provinciales, a esta región no le tocó ni siquiera un legislador que represente a un millón y medio de personas. La lista la hicieron enfrente del partido y pusieron los nombres que querían y La Cámpora se agarró los cargos en las listas, fue el responsable de dejar a toda esta región sin legisladores», recordó el intendente.
Como contraste, señaló al gobernador Axel Kicillof: «Lo voy a respaldar hasta las últimas consecuencias.El gobernador tiene problemas severos para conducir la provincia, le recortan los fondos, baja la recaudación y encima tiene que luchar contra los de afuera y los de adentro», destacó..
Tampoco ishii omitió la experiencia de Unidad Ciudadana en 2017 por fuera de la estructura del PJ, que llevó como candidato a Florencio Randazzo.
«Hace 7 años los que ahora piden competir dejaron tirado al PJ. Fui yo el que levantó la bandera para pelear la interna con Randazzo. Digamos las cosas como son: son los que hace 7 años abandonaron el partido y ahora lo quieren tomar», subrayó.
Finalmente destacó que «mi único conductor fue Néstor Kirchner y está en el sur», y apuntó a La Cámpora: «Le digo a esta gente que pare con la locura de ir a una interna».
Los conceptos de Ishii expresan el pensamiento y la posición de buena parte del peronismo y del espacio de UxP que no responde a La Cámpora. La irracional decisión de Cristina y Máximo de consolidar institucionalmente una dinastía familiar, hegemonizando el dedo y la lapicera para definir listas electorales y expulsar a quienes piensen diferente o no se sometan, está causando estragos a lo largo y a lo ancho del territorio nacional, e incluso es críticamente percibido por la sociedad, a punto tal que permitió mejorar la imagen de Javier Milei, que venía cayendo en picada desde hace dos meses.
Seguramente Cristina llegará a la presidencia de un PJ que, en realidad, no será mucho más que una Unidad Ciudadana recortada con una nueva denominación. Pero el rechazo del peronismo no cristinista y de quienes respaldan a Axel Kicillof, quien supera en imagen a la propia Cristina dentro de los votantes del espacio, anticipan que será una victoria pírrica: la que se corresponde con una ambición enfermiza de la Dinastìa que no es capaz de asumir que ya no es lo que, hasta algún tiempo atrás, supo ser,