El futuro Presidente Provisional del Senado, Francisco Paoltroni, intentó disipar los rumores insistentes que hablaban de una ruptura de la relación entre Javier Milei y Victoria Villarruel a partir de la designación de Bullrich como Ministra de Seguridad y de Luis Petri como Ministro de Defensa, áreas que previamente se habían negociado como competencias de la vicepresidenta.
«No hubo ningún desaire. Sólo reacomodamientos de piezas», afirmó el senador por Formosa, quien admitió además no contar con experticia política previa.
La frase que utilizó para sentenciar la inexistencia de conflictos entre ambos pareció dar cabida a la interpretación inversa: «Acá tenemos un líder indiscutido y las decisiones las toma el presidente de la Nación», enfatizó. A Villarruel sólo le queda aceptar la decisión adoptando la ética militar que tanto conoce: Subordinación y valor.
Paoltroni, quien explicó además que había sido propuesto por la propia Villarruel como presidente provisional del Senado en reemplazo de Claudia Ledesma –otra afirmación que ha sido puesta en duda-, anticipó que se dedicará a «buscar consensos», y trató de convencer de que, «como no viene de la política», no tiene «prejuicios». Sin embargo, esa falta de experticia es considerada como la principal traba para su desempeño en las condiciones en las que le tocará actuar, ya que La Libertad Avanza sólo cuenta con 7 senadores propios.
En tono conciliador, afirmó que «hay que bajarle la espuma» a “especulaciones” sobre desacuerdos en el oficialismo, ya que las disidencias son «propias y naturales de cualquier armado». «No hay mucho tiempo para pequeñeces. Tenemos este gran desafío que es empezar a cambiar normas y reglas que nos han traído a este fracaso», sentenció.
Sobre su agenda al momento de asumir sus funciones, anticipó que las primeras reformas se cuenta la necesidad de remediar «el desastre del 50% de la pobreza», para lo cual se avanzaría con una reforma laboral.
Al ser consultado sobre las declaraciones del senador cordobés Luis Juez, quien condicionó su apoyo al oficialismo a la exclusión total del peronismo dentro del nuevo gobierno, se mostró cauto y argumentó que «Desconozco esas declaraciones».
Optimista en extremo, consideró que siete legisladores sobre un total de 72 “son un montón», y se manifestó confiado de poder alcanzar los consensos necesarios para aprobar las leyes ya que la «mayoría de los legisladores desea un cambio».
Respecto de la oposición que podría presentar el bloque de UxP a las reformas, consideró que no se trataba de un problema. «No creo en ese bloque y en esa lógica. Ha funcionado muy poco ese bloque. Entre esos 33 senadores yo avizoro tres grupos: uno que puede seguir respondiendo a Cristina Kirchner, otro que responde a sus gobernadores y otro de independientes. No veo ese bloque de 33 personas obedeciendo a una señora que se fue a vivir a un pueblo del sur», argumentó en tono desafiante.
Lo vamos conociendo. Francisco Paoltroni, un optimista. Al menos, al comienzo de su gestión.