En un contexto complejo en el que la Argentina se encuentra sin dólares para afrontar los vencimientos con el FMI y el organismo de crédito se muestra reticente a garantizar el envío de fondos para aprobar esos pagos, los especialistas sostienen que la posibilidad más cierta es que se acuerde una «tregua» hasta después de las PASO, interín en el cual los burócratas del Fondo estarán de vacaciones a partir del próximo lunes.
Las reuniones entre los funcionarios argentinos que viajaron a Washington para cerrar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y los funcionarios del organismo se suceden, pero el entendimiento parece lejano. El punto principal en disputa es el número exigido de ajuste fiscal.
En un comunicado oficial, el Fondo informó que: «El equipo del FMI y una delegación argentina comenzaron las reuniones técnicas presenciales esta tarde en Washington para avanzar en la quinta revisión del programa respaldado por el Fondo. Se espera que estas reuniones continúen durante los próximos días.»
Días atrás, Sergio Massa mantuvo conversaciones desde Buenos Aires con Mike Pyle, Asesor Económico Internacional del Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos, y con Jorg Kukies, Secretario de Estado de la Cancillería Federal de Alemania. «Si bien es cierto es Georgieva le prometió a Massa aflojar la meta del 1.5% de déficit fiscal, todavía no hay acuerdo sobre el número finito.»-dejaron trascender en las proximidades del Ministro de Economía. «Además todavía no está asegurado el apoyo de los países que integran el board, y por eso Massa estuvo negociaciando con EEUU y Alemania.»-se puntualizó.
La Argentina había solicitado pagar los vencimientos del corriente mes por 2.700 millones de dólares a fines de julio, a la espera de un acuerdo previo con el organismo. Pero ahora la burocracia del FMI entra en su receso veraniego, por lo que no habría chances de que el Board del organismo apruebe cualquier negociación que consiguiera cerrarse antes de que concluya el plazo.
En la actualidad, hay tres alternativas posibles: 1) que el FMI envíe los fondos suficientes para poder cumplir los pagos comprometidos e impedir una corrida financiera; 2) que Argentina efectivice el pago con yuanes disponibles del Swap con China; y 3) que el país no pague y entre en una situación de «default», que implicaría graves consecuencias financieras y económicas para nuestro país.
Las negociaciones que se intentan cerrar ahora llevan casi tres meses y no se ha conseguido llegar a un acuerdo. Una alta fuente de nuestro gobierno deslizó que: «Quiza más que acuerdo, haya una tregua, y manden lo mínimo necesario para contener y que no desbarranque.»
Y es que tampoco el Fondo se encuentra en situación equilibrada para tomar alguna decisión que necesariamente profundizaría la crisis interna que experimenta. Kristalina Georgieva sufre un fuerte cuestionamiento, y hasta se ha mencionado a Nadia Calviño, Ministra de Economía española, como posible reemplazante.
Sólo queda esperar, cortando clavos.