El Movimiento Evita fue el principal perjudicado en el reparto de candidaturas del sábado pasado, al quedar excluido tanto de la lista de senadores como de la de diputados nacionales. Todo lo que consiguieron fue ubicar a María Noelia Saavedra, concejal de Moreno, como segunda precandidata a senadora provincial por la Primera Sección Electoral, y no a partir de la muñeca partidaria sino de la presión de la intendenta Mariel Fernández.
La conducción del Evita pretendió justificarse asegurando que: “Priorizamos las internas en algunas intendencias por encima de un diputado nacional.” Pero quedó en claro que su alineamiento con Alberto Fernández y los grandes beneficios que recibió hasta ahora caducaron al momento de componer las listas. El presidente pidió por Victoria Tolosa Paz y por Santiago Cafiero. Pero a ellos los dejó en banda.
Otros movimientos sociales, como Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa tuvieron su premio, y el Frente Patria Grande y del Movimiento Trabajadores Excluidos (MTE) tienen la chance de sumar a través del desempeño de la fórmula Juan Grabois-Paula Abal Medina. Pero el evita se fue con las manos vacías.
El Movimiento Evita, a través de Lis Días, dijo que competirá en internas en Tres de Febrero contra Daniel Menéndez, su socio político en La Patria de los Comunes. Si eso sucede, el flamante partido político se podría quebrar a meses de haber surgido
El Evita parece correr la misma suerte que Alberto Fernández. Tratará de competir en algunos municipios, pero con posibilidades acotadas. En Tres de Febrero se quedó asilado, mientras que en La Matanza las posibilidades de la diputada provincial Patricia “Colo” Cubría son muy acotadas en relación con la gran ayuda económica que recibió de su pareja, Emilio Pérsico, Secretario de Economía Social. Prueba de esto son las declaraciones de Fernando Espinoza, el intendente contra quien han decidido competir allí: “Estoy muy contento porque finalmente logramos una unidad impresionante, nunca habíamos logrado semejante amplitud, no solamente con todos los sectores del movimiento nacional peronista, sino también con sectores extrapartidarios de la sociedad civil y eso es todo un mensaje hacia esta nueva Argentina que viene.”
También el Evita se presentará a internas en Ituzaingó, con Natalia Peluso como candidata; y también en Lobos y en Lanús. En San Martín el ex diputado Leonardo Grosso se enfrentará en San Martín -territorio del ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis- al alcalde Fernando Adrián Moreira. Y también lo hará en Navarro y en Marcos Paz.
De los distritos en los que competirá, toda la carne al asador se viene poniendo en La Matanza y en Moreno, donde Mariel Fernández busca su reelección. En la práctica, esta es la única que cuenta con chances de conseguir su objetivo.
Mientras que, con mayor o menor suerte, el resto de los movimientos sociales han conseguido colar algunas candidaturas a través de la rosca política, el Evita intenta disimular su fracaso presentándolo como el precio a pagar para garantizar la unidad y “derrotar a la derecha”.
Su alianza con Alberto Fernández resultó un excelente negocio hasta ahora, pero los dejó aislados y debilitados políticamente. Una victoria de UxP los colocaría en una pésima situación, aunque formalmente integren la coalición.
Al Movimiento Evita le fue pésimo en el reparto de candidaturas
