• 02/10/2024 06:49

Milei colgado de la cadena, mientras que la economía se hunde y la sociedad comienza a despertarse

Abr 22, 2024

Mientras que Javier Milei se prepara para realizar una nueva cadena nacional –si, las mismas que tanto se le criticaban a Cristina- para contraponer a la ictericia que le provoca la marcha universitaria de este martes, presentando falacias contables para celebrar el tercer mes de “superávit fiscal” y acusaciones falsas contra el manejo de las casas de altos estudios para desalentar la participación masiva de la ciudadanía en la protesta, su ex asesor, el economista liberal Carlos Rodríguez, salió a cruzarlo con vehemencia: «Se va a convertir en uno de los personajes más odiados del país», enfatizó.
Para el economista, las políticas económicas de Milei son un desastre, y si el presidente «todavía no es» el más odiado de Argentina «porque la gente no entiende lo que está pasando. Pero cuando miren el ajuste y se den cuenta de que está cortando a troche y moche, sin distinguir». «.
«El plan de ajuste es simplemente no pagar», destacó Rodríguez, quien insistió en que Milei se «va a convertir en uno de los cien personajes más odiados del país» por su gestión económica.
«Va y da esos discursos y después lo nombran entre los cien personajes más importantes del planeta. Y acá se va a convertir en uno de los cien personajes más odiados del país», satirizó. «Milei tiene un modelo de ajuste con una sola variable en mente: la tasa de inflación. Y la gente lo apoya». «El problema es que no hay un plan económico para atacar el equilibrio fiscal», afirmó, en coincidencia con la opinión del FMI, que le recomendó operar sobre la “calidad del ajuste”.

«El plan de ajuste es simplemente no pagar. En estos primeros meses hay reducción del gasto en todas las áreas. Yo no veo un plan. No se les transfiere plata a las provincias. ¿A cuáles? A todas. ¿La seguridad y los sueldos? No se da plata a nadie. ¿Obra pública? Se suspenden todos los pagos de obra pública», graficó al tiempo que señaló que «no hay señales para invertir, consumir y gastar. La única señal es ‘escondé la plata que tenés porque te la sacan.’”, sentenció.
Junto con la mayoría de los economistas de todo el arco ideológico, desde Domingo Cavallo hasta Guillermo Moreno pasando por Miguel Angel Broda, Matías Kulfas o Martín Lousteau, Rodríguez también afirma que la Argentina está «yendo a una depresión económica». «No veo cómo se va a recuperar la caída de la inversión», explicó.

Asimismo advirtió que «la población no entiende, el FMI está feliz y los tenedores de bonos están contentos con cobrar en junio el AL30. Entonces, baja el riesgo país. No importa de dónde sale la plata, mientras la plata esté. Ojo con esos indicadores».

En la economía hay dos primas de riesgo: pública y privada. «Si el sector público le saca plata al privado, va a subir la prima de riesgo privado y va a bajar la pública. Entonces, los tenedores de deuda pública están felices, pero los proyectos de inversión privada se hacen pomada», indicó.
Rodríguez es el referente del Centro de Estudios Macroeconómicos de la Argentina (CEMA) y si bien asesoró al primer mandatario durante toda la campaña, su alejamiento de la Libertad Avanza vino luego de la designación de Luis Caputo como ministro de Economía. Respecto del “Toto” sostuvo que le falta «una concepción del ajuste estructural que hace falta en el sector público y privado».

«Lo único que vimos es una reducción de gasto en todos lados y una preocupación por acumular reservas para que baje el riesgo país y puedan entrar de nuevo los mercados de capitales. Es lo que haría un hombre de finanzas, como Caputo. En cambio, un economista estaría tratando de desarrollar un plan económico. Hay que hacer ajustes que sean sostenibles», concluyó.
Cada día que pasa queda más en evidencia que la economía argentina marcha inexorablemente hacia una gran depresión, provocada por las políticas del actual gobierno. Por si fuera poco, la marcha universitaria del 23 de abril provoca insomnio en un gobierno que sólo encuentra en la mentira argumentos para tratar de desalentar la participación. Karina exige aplicar el Protocolo de Bullrich y reprimir. Ni la propia Ministra de Seguridad, ni la Jefatura de Gobierno de CABA, ni buena parte de la mesa chica de Milei coinciden: la represión sobre estudiantes de clase media los enfrentará con su propio electorado.
¿Privará la racionalidad política o las “fuerzas del cielo” invocadas por la pitonisa Karina?