Un combo de terribles medidas de ajuste, beneficios inéditos para empresarios amigos y pésimas señales de autoritarismo y falta de respeto por los derechos civiles impulsados por el gobierno de Javier Milei comenzaron a consumirle parte de su capital electoral, a un ritmo de casi un 1% diario. Así lo demuestra la encuesta nacional realizada por la Consultora Zubán Córdoba sobre la imagen del Presidente y sobre cómo evalúa la población sus principales medidas económicas. Con los datos a la vista, el 51,6% de los encuestados reprobó al Gobierno totalmente.
La encuesta, además, comprobó un aumento en la imagen negativa de Javier Milei entre la primera y la segunda parte del mes de diciembre, en el que arrancó con un 50,1% y lo termina con 55,5% de reprobación.
En lo referido al nivel de aprobación del Gobierno, un 51,6% manifestó reprobarlo totalmente, en tanto un 38,6% lo aprueba totalmente. Respecto de las reformas anunciadas y los altísimos niveles de inflación que promueve el gobierno con sus decisiones, un 51,9% escogió la opción «ya me afecta y no voté a Milei», contra un 38,2% que afirma que lo impacta, aunque lo seguirá apoyando.
Respecto de las polémicas medidas que se adoptaron en los primeros días de gobierno, y en especial del Mega DNU descalificado por los constitucionalistas, un 56,1% consideró que el decreto desregulador de la economía es «inconstitucional y debe ser derogado por el Congreso o la Justicia, frente a un 39,8% que considera que es «constitucional y debe entrar en vigencia».
Ante las afirmaciones oficiales de que si el poder Legislativo o el Judicial rechazacen el DNU, Milei convocará a un plebiscito, un 54,6% afirmó que estaría en contra de esa decisión, mientras que el 41,4% afirmó que lo respaldaría.
No le fue mejor en lo referido al desembozado beneficio que reciben algunas empresas o empresarios con disposiciones que están redactadas a medida de sus intereses. En este caso, un 47,8% aseguró que “el DNU desregula el funcionamiento de la economía en favor de un grupo de empresas». Tampoco consiguió instalar la tesis de que «el único camino de la Argentina es ajuste con shock, nunca el gradualismo», ya que un 47,8% «muy en desacuerdo» con esa afirmación contra sólo un 32,1% que dice estar «muy de acuerdo».
Sobre la afirmación de que si Milei aumenta más de 300% la luz, el gas y el transporte público, igual lo voy a seguir apoyando», un 52,7% de los encuestados afirmó estar «muy en desacuerdo», en tanto sólo un 24,7% que afirma estar a favor.
Por último, en lo referido a la denominada “Ley Ómnibus» que Milei envió al Congreso, y que ha sido definida como una “reforma constitucional encubierta” por los constitucionalistas, un 52,9% se manifestó «muy en desacuerdo» de darle al Presidente «poderes especiales para modificar leyes y códigos, frente a un 24,3% que afirmó estar «muy de acuerdo».
Sobre este mismo proyecto de ley, un 53,1% afirmó estar «muy en desacuerdo» con que «el Congreso debiera aprobar la ley omnibus de Milei sin cambiar o modificar nada», y sólo un 22,4% sostiene estar a favor.
En síntesis, mientras que el gobierno pretende hacerse con la suma del poder público alegando tener el respaldo del 55% de los argentinos, las encuestas y la evolución del humor social lo encuentran cada vez más relegado a niveles inferiores al 30% que lo acompañó en la primera vuelta electoral. Por esta razón la necesidad de suprimir las instituciones para instalar un orden represivo que prohíba la protesta social y la deliberación política. No sorprendería que nuevas ofensivas autocráticas se repitan en los próximos días, ante la comprobación de que el gobierno se encuentra cada vez más cuestionado y aislado socialmente, y que el impacto de sus políticas económicas sólo profundizará el malhumor de los argentinos.